Muchos documentales se han realizado sobre valparaiso, contando su historia de puerto principal, lugares tipicos para apreciar la vista, o de su bohemia
Pero en este ultimo trabajo lanzado por el realizador Osvaldo Rodriguez se busca demostrar el otro lado de valparaiso, los parajes que solo un porteño conoce, lejos de los turistas y camaras de television.
Es así como Rodríguez en medio de un recorrido por el cerro bellavista, se encuentra con un porteño de tomo y lomo, Luis Rubilar “el conejo”, conocido acomodador de los colectivos en la plazuela ecuador”, con el cual entabla una conversacion en busca de un recorrido diferente por Valparaiso.
“Yo me encontraba limpiando mi “joyita”, mi escarabajo rojo de 1981 como siempre lo hago en dias festivos, ahí afuera del ascensor Espíritu Santo, cuando se me acercan unos turistas pidiendome instrucciones para llegar a la Sebastiana, se las doy y noto que un joven me queda mirando y se me acerca contandome que desea hacer un tour por valparaiso, me dice que es un cineasta y busca buenas vistas de la bahia, lo del documental me lo conto al final.” nos cuenta “El conejo”
Es asi como la historia del documental se va armando, el proceso duro 2 meses en donde cada fin de semana el joven realizador llamaba previamente al “Conejo” y se juntaban a recorrer Valparaiso en el escarabajo.
“Yo lo lleve a lugares diferentes, en cierto sentido como el lado “b” del puerto, donde solo un porteño sabe llegar, de primera no le tome mucho asunto que el grabara todo, o que en algunas conversaciones me grabara contando detalles de mi vida, inclusive vino a la casa y grabo a mi señora tambien, o la vision que yo tenia de Valparaiso, solo al final supe que el estaba buscando imágenes para armar un documental sobre Valparaiso y que yo seria su presentador (risas)”.
La historia de Luis Rubilar en Valparaíso se remontan al año 1979 en donde llega al puerto y se enamora de él, aunque su familia es de Santiago, el tenia una hermana que vivía aquí por lo que se vino a estudiar la enseñanza media. Por problemas con su hermana ella lo manda a Santiago de vuelta, pero como el mismo nos cuenta “Ella me subió al bus, pero yo a la altura de donde estaba antiguamente el Inacap ya tenía vendido mi boleto, y me baje del bus jajaja”.
Por lo que se quedo trabajando en las micros junto a los micreros con los que hizo amistad cuando los tomaba para asistir al colegio todas las mañanas. Pero luego de un tiempo nació la idea de empezar a trabajar con colectivos, haciendo el mismo trabajo de subir gente a los diferentes recorridos que salían de la plazuela Ecuador, esto ya hace 26 años, y muchas historias se han tejido a través de “El Conejo”, su apodo en el paradero,
“Yo ya he subido a los colectivos a tres generaciones de personas del cerro, familias completas. Este trabajo me gusta y me siento cómodo la gente ya me tiene cariño porque el trabajo que ofrezco siempre ha sido en el marco del respeto y la eficiencia”
Una fecha tentativa del lanzamiento del documental en Valparaíso es el 24 de abril, en donde se busca que sea exhibido en el Teatro Municipal, además de ser enviado a diferentes festivales de cine a nivel nacional e internacional en busca de mostrar un Valparaíso no conocido.
